jueves, 6 de noviembre de 2008

Remedios Caseros


Huesos y tendones. En Encinasola se curaba el mal de tendones de la misma manera que en Álora, de Málaga; para eso son pueblos hermanos con la Virgen de Flores por Patrona. En los dos se aliviaban torceduras, esguinces y huesos mal avenidos. Todo se hacía por la Gracia de Dios.
-El paludismo, las tercianas, las cuartanas, todo esto venía a ser lo mismo, o se creía así. Se usaban compresas en la frente
empapadas en agua helada y vinagre, y de aguardiente. En Encinasola iba al campo al alba un pariente, cortaba una vara de adelfa, tiraba un puñado de sal y decía: Tercianas son cuartanas son aquí te las dejo quédate con Dios.



Como veis en el escrito anterior es de muchos años atrás, me gusta leer libros y prensa antiguas donde se encuentran estas cosas, en el periódico de Blanco y Negro se leen poesías y escritos de la guerra de Cuba con curiosidades, que en otra ocasión los mandare.

Faustino Jiménez 5-11-2008
Nota:este escrito tiene relación con el anterior escrito por Toni Vaello, los dos hacen referencias a los remedios caseros.

5 comentarios:

  1. En aquellos tiempos aparte de productos naturales la participación de Dios en las curaciones era muy importante.
    Saludos.
    Carmen

    ResponderEliminar
  2. En aquella época la participación de Dios en todas las curaciones, aparte de los remedios caseros era lo único que habia.
    Muy interesante el escrito.
    Saludos.
    Carmen

    ResponderEliminar
  3. En el barrio "La cebá" estaba la "tía Liboria"; esta buena señora tenía una habilidad algo extraordinaria colocando huesos y tendones dislocados, lo hacía sin anestesia, se veían las estrellas, claro; para ello se colocaba a su lado una taza con aceite de oliva donde se untaba las manos para aplicarlas en la zona afectada con una destreza impresionante. Ahí no había conjuros ni ningún tipo de raras artes,lo digo por experiencia porque yo fui uno de sus pacientes; de haberlos habido hubiera salido "escapao". Los resultados eran positivos en la mayoría de los casos, conmigo así fue. Cordial saludo. Jesús

    ResponderEliminar
  4. Que alibio nos proporcionaban los remedios caseros y nos vienen proporcionando por lo menos en mi caso, me gustan mucho los remedios caseros; por ejemplo: a mi hijo le curé un esgince con una hoja de chumbera partida por la mitad y puesta a tostar, cunado esta ya tibia se pone al rededor del esgince y se envuelve con una toalla. !milagroso!.

    ResponderEliminar
  5. Que razón tienes Jesús, la tía Liboria de vivir en estos años, seria una excelente fisio. Cualquier equipo de fútbol se la rifaría, era extraordinaria en todo lo que fuera, colocación de huesos y dolores reumáticos. Un saludo amigo Jesús. Faustino, me a gustado mucho tu escrito sobre los remedios caseros.

    A.Vaello

    ResponderEliminar

Para hacer un comentario te vas a seleccionar "Perfil" marcas anonimo escribe el comentario y le das a publicar.
En casos que estes registrado y tengas algun Blog y te pide la URL es la direccion de tu blog y el nombre que quieres que salga, que es el que ya tengas adoptado, en mi caso es Fontenla.

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.